“El ODIO TE ALEJA DE DIOS Y DE SUS BENDICIONES”
Wikipedia define el “ODIO”:
Como un sentimiento de profunda antipatía, disgusto, aversión, enemistad
o repulsión hacia una persona, cosa, o fenómeno, así como el deseo de evitar,
limitar o destruir a su objetivo. El odio se describe con frecuencia como lo
contrario del amor o la amistad. El odio puede generar sentimientos de rechazo
o repugnancia exagerada hacia una persona o cosa, sentimientos de destrucción,
destrucción del equilibrio armónico y ocasionalmente autodestrucción.
Bíblicamente hablando, hay aspectos
positivos y negativos al odio. Es aceptable odiar aquellas cosas que Dios odia;
de hecho, esto es una prueba de una posición recta delante de Dios. Salmos 97:10
“Los que amáis a Jehová, aborreced el mal; él guarda las almas de sus santos;
de manos de los impíos los libra.” Mientras
más íntimo, real, y cercano es nuestro
caminar Y comunión con el Señor, más estaremos conscientes del pecado, tanto
dentro como fuera. _Nos enfurecemos con enojo cuando el nombre de Dios es
calumniado, cuando vemos hipocresía espiritual, cuando vemos incredulidad
descarada y comportamiento impío (Sin Piedad) _ *Cuando vemos a una persona
abusando de otro más débil sin motivos o
cuando se hiere o se le hace daño a personas inocentes, como los talibanes y
ISIS _ Nuestro corazón se llena de rabia y disgusto. Podemos decir que mientras
más entendemos los atributos, la Palabra de Dios y amamos su carácter, nos
acercaremos más a él y más odiaremos aquellas cosas que son
contrarias a su palabra y su naturaleza. Proverbios 8:13 “El temor de Jehová es aborrecer el mal: yo aborrezco la
soberbia, la arrogancia, el mal camino y la boca perversa.” Sin embargo, el odio que es negativo es el que se
dirige contra los demás. El Señor nos enseña sobre el odio en el sermón del monte: Mateo 5:22 “Pero
yo les digo que todo el que se enoje con su hermano será culpable en el juicio.
Cualquiera que le llame a su hermano ‘necio’ será culpable ante el Sanedrín; y
cualquiera que le llame[a] ‘fatuo’ será expuesto al infierno de fuego.” JESUS nos
manda a que seamos reconciliados con nuestro hermano antes de ir ante el Señor,
y además que lo hagamos rápido (Pronto) (Mateo 5:23-26). Todo acto o pensamiento de
odio es un acto de asesinato en los ojos de Dios por el cual la justicia será
demandada, posiblemente no en esta vida pero en el juicio final. Tan atroz es
la posición del odio ante Dios, que un hombre que odia se dice estar caminando
en la oscuridad, 1
Juan 2:9-11 “El que dice que está en la luz y odia a su hermano, está en
tinieblas todavía. El que ama a su hermano permanece en la luz y en él no hay
tropiezo. Pero el que odia a su hermano está en tinieblas y anda en tinieblas;
y no sabe a dónde va porque las tinieblas le han segado los ojos.” La peor situación es la de un hombre que es muy
religioso pero permanece en enemistad con su hermano. Las Escrituras declaran que
tal persona es un mentiroso e hipócrita; 1ª Juan 4:20 “Si alguien dice: “Yo amo a Dios” y odia
a su hermano, es mentiroso. Porque el que no ama a su hermano a quien ha visto,
no puede amar a Dios a quien no ha visto.”
Puedes engañar a los hombres, pero no a Dios.
¿Cuántos creyentes viven durante años fingiendo que todo está bien, sólo para
ser hallado culpable porque ha guardado odio
o enemistad contra un compañero creyente
o un familiar? Proverbios
26:26 "Aunque con engaño encubra su odio, su maldad será descubierta en la congregación."
El odio es un veneno que
nos destruye desde adentro, produciendo amargura que poco a poco contamina nuestro corazón y nuestra mente. Por esto la Biblia nos dice sobre “raíz
de amargura" en nuestros corazones Hebreos 12:15 “Asegúrense de que nadie deje de alcanzar la
gracia de Dios; de que ninguna raíz amarga brote y cause dificultades y
corrompa a muchos;” Seamos
cuidadosos de hacer lo que el Señor aconsejó y mantener cuentas claras con
todos acerca de todo, no importa cuán pequeño pueda ser, y el Señor será fiel a
perdonar, como él ha prometido; 1 Juan 1:9 “Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es
fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.”
El odio es sinónimo de
hostilidad, resentimiento, rencor, lo cual genera un sentimiento de profunda
enemistad y rechazo que conduce al mal hacia una persona o el deseo de
enfrentamiento con la misma. En referencia a lo anterior, el odio es visto como
un valor negativo que va en contra del amor o la amistad, que produce disgusto
o repulsión hacia una persona, cosa o situación con el deseo de destruir o
evitar todo aquello que se odia. Proverbios 10:12 "El odio es motivo
de disensiones, pero el amor cubre todas las faltas."
Dios
creó a los hombres para que sean hermanos y vivieran en el amor, sin embargo,
este sentimiento se observa desde tiempos remotos e inclusos en pasajes
bíblicos, como es el caso de Caín y Abel, Jacob y Esaú, los hijos de Jacob con
José, entre otros. Con base a
lo anterior, quien sigue a Dios debe de amar al prójimo, reconciliarse, y estar
presente para servir su mano amiga, en los buenos y malos momentos. En relación
a este punto, existen diversas citas bíblicas: "Pero yo os digo que cualquiera que se
enoje contra su hermano, será culpable de juicio" (Mateo5:22)
En Conclusión: Efesios 4:29-32
“Ninguna palabra obscena salga de su boca sino la que sea buena para
edificación, según sea necesaria, para que imparta gracia a los que oyen. Y no
entristezcan al Espíritu Santo de Dios en quien fueron sellados para el día de
la redención. Quítense de ustedes toda amargura, enojo, ira, gritos y calumnia,
junto con toda maldad. Más bien, sean bondadosos y misericordiosos los unos con
los otros, perdonándose unos a otros como Dios también los perdonó a ustedes en
Cristo.” No dejemos que el sol se
ponga sin hacer la paz con esa persona a la cual le guardamos rencor porque si
no lo hacemos llevaremos dos cruces en nuestro diario vivir y nunca tendremos
Paz y si no tenemos Paz nunca seremos felices viviendo amargados y en tinieblas…
Que Dios nos bendiga con un corazón de carne y humilde sensible a su palabra y
a su Amor; Tu hermano Hector Peguero.