"¿Por
qué nos permite Dios pasar por pruebas y tribulaciones?"
Vamos a estudiar primeramente el significado de La palabra prueba, la cual
evoca dos series de realidades. Una, orientada hacia la acción: un
examen, un concurso: otra, replegada en la aflicción; una
enfermedad, un luto, un fracaso. Y si la palabra ha pasado del primer
sentido al segundo, ha sido sin duda porque, según una sabiduría ya
religiosa, el sufrimiento se experimenta como un «test» revelador
del hombre.
El
sentido activo es primero en la Biblia: nsh,
bhn, hqr. peiradsein, diakrinein,
para limitarnos a las raíces principales, significan «poner a
prueba», tratar de conocer la realidad profunda más allá de las
apariencias inciertas. Como una aleación, como un adolescente, el
hombre debe «dar prueba de sí». De suyo, no hay aquí nada de
aflictivo.
Tentar
es también «ensayar», experimentar. Pero si la tentativa se
convierte en tentación y el experimento o la prueba pasa al estado
crítico, entonces el hombre debe revelar en ella su verdadera
orientación profunda. Así, Dios tienta al hombre.
Si
la Biblia distingue la prueba particular que es la tentación, es
porque parece torcerse oscuramente hacia el mal. Aquí interviene un
tercer personaje, el tentador. Ya no es Dios quien tienta. Así en
Gen 2,17
se trata de una prueba, en Gen 3,
de una tentación Sant 1,1-12
1,13ss.
La
experiencia de la prueba-tentación no es sencillamente de orden
moral; se encuadra en un drama religioso e histórico; hace entrar en
juego nuestra libertad
en el tiempo,frente a Dios y a Satán.
En las diversas etapas del designio de Dios es interrogado el hombre:
su vida teologal se pone a prueba en todos sus aspectos, pudiendo a
veces cargarse el acento sobre uno o sobre otro de ellos.
Una
de las partes más difíciles de la vida cristiana es el hecho de que
ser un discípulo de Cristo no nos hace inmune a las pruebas y las
tribulaciones de la vida. ¿Por qué un Dios bueno y amoroso nos
permitiría pasar por cosas tales como la muerte de un niño,
enfermedades y daños a nosotros mismos y nuestros seres queridos,
dificultades financieras, preocupación y temor? Seguramente, si nos
amara, quitaría todas estas cosas de nosotros. Después de todo, ¿no
significa el amarnos que Dios dios permite las pruebas?quiere que
nuestras vidas sean fáciles y cómodas? No, no es así. La Biblia
enseña claramente que Dios ama a aquellos que son Sus hijos, y
“todas las cosas les ayudan a bien.” (Romanos
8:28).
Eso debería significar entonces que las pruebas y tribulaciones que
Él permite en nuestras vidas son parte de todas las cosas que nos
ayudan a bien. Por lo tanto, para el creyente, todas las pruebas y
tribulaciones deben tener un propósito divino.
Como
en todas las cosas, el propósito sobresaliente de Dios es que seamos
transformados más y más a la imagen de Su Hijo (Romanos
8:29).
Esta es la meta del cristiano, y todo en la vida, incluyendo las
pruebas y tribulaciones, está diseñado para permitirnos alcanzar
esa meta. Es parte del proceso de la santificación, siendo apartados
para los propósitos de Dios y equipados para vivir para Su gloria.
Se explica la manera en que las pruebas logran esto en 1
Pedro 1:6-7:
“En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de
tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas
pruebas, para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa
que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea
hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado
Jesucristo.” La fe del verdadero creyente se reforzará mediante
las pruebas que experimentamos para que podamos descansar en el
conocimiento de que es real y va a durar para siempre.
Las
pruebas desarrollan el carácter piadoso, y eso nos permite
“…[gloriarnos] en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación
produce paciencia; y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; y
la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado
en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.”
(Romanos
5:3-5).
Jesucristo fue el ejemplo perfecto. “Mas Dios muestra su amor para
con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por
nosotros.” (Romanos
5:8).
Estos versículos revelan aspectos de Su propósito divino tanto por
las pruebas y tribulaciones de Jesucristo como por las nuestras. El
perseverar comprueba nuestra fe. "Todo lo puedo en Cristo que me
fortalece" (Filipenses
4:13).
Sin
embargo, debemos tener cuidado de nunca hacer excusas por nuestras
“pruebas y tribulaciones” si son el resultado de nuestra propia
maldad. "Así que, ninguno de vosotros padezca como homicida, o
ladrón, o malhechor, o por entremeterse en lo ajeno." (1
Pedro 4:15).
Dios perdonará nuestros pecados porque el castigo eterno para ellos
ha sido pagado por el sacrificio de Cristo en la Cruz. Sin embargo,
todavía tenemos que sufrir en esta vida las consecuencias naturales
por nuestros pecados y malas decisiones. Pero Dios usa incluso esos
sufrimientos para moldear y formarnos para Sus propósitos y nuestro
último bien.
Las
pruebas y tribulaciones vienen con un propósito y una recompensa.
“Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas
pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas
tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y
cabales, sin que os falte cosa alguna… Bienaventurado el varón que
soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba,
recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le
aman."(Santiago
1:2-4,12).
A
través de todas las pruebas y tribulaciones de la vida, tenemos la
victoria. “Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria
por medio de nuestro Señor Jesucristo.” (1
Corintios 15:57).
Aunque estamos en una batalla espiritual, Satanás no tiene autoridad
sobre el creyente en Cristo. Dios nos ha dado Su Palabra para
guiarnos, Su Espíritu Santo que fortalecernos, y el privilegio de
venir a Él en cualquier lugar y en cualquier momento, a orar por
todo. Él también nos ha asegurado que no habrá tentación que nos
pondrá a prueba más allá de nuestra capacidad para resistir, y
“dará también juntamente con la tentación la salida, para que
podáis soportar.” (1
Corintios 10:13).
Las
pruebas son periodos de tiempo en que el cristiano enfrenta diversas
circunstancias tristes, dolorosas, difíciles e imposibles.
Periodos
de tiempo en los que la ausencia de Dios se experimenta con
intensidad y en todas sus dimensiones.
Da
la impresión que todo ha perdido el control y que se esta abandonado
a las tempestades circundantes. La realidad y el poder de Dios no se
vislumbra por ningún lado. Todo es una noche tempestuosa por
doquier.
Pero
si Dios es todopoderoso y lleno de amor para con sus hijos, como es
posible que permita las pruebas?
Que
permita enfermedades... situaciones estresantes... desilusiones
sentimentales... despidos de los trabajos... muertes inesperadas de
seres queridos... catastrofes naturales... accidentes... y un sin
numero de situaciones similares.
Es
posible que alguien que lea esto se identifique con alguna de las
situaciones que he mencionado acá y le diga al Señor:
POR
QUE?... POR QUE?... POR QUE?
Preguntemonos
antes:
Que
sentido tienen las pruebas en la vida?
A
que nos conducen?
Veamos
la respuesta que nos da la Palabra de Dios al respecto:
HERMANOS
MIOS, TENED POR SUMO GOZO CUANDO OS HALLEIS EN DIVERSAS
PRUEBAS
SABIENDO
QUE LA PRUEBA DE VUESTRA FE PRODUCE PACIENCIA. MAS TENGA LA PACIENCIA
SU OBRA
COMPLETA
PARA QUE SEAIS PERFECTOS Y CABALES, SIN QUE OS FALTE COSA ALGUNA.
Santiago 1:2-3
Santiago
recomienda, inspirado por el Espíritu Santo, que cuando las pruebas
lleguen estemos sumamente gozosos...
Alguien
dira: Eso es masoquismo; sin embargo no lo es, pues sabemos que la
prueba nos conducirá a madurar en la FE y en la PACIENCIA.
Es
imposible llegar a crecer en la FE y en la PACIENCIA si no se
presentan las circunstancias para ello. Así como la planta necesita
agua y luz para crecer, también de la misma manera necesitamos la
PRUEBA para crecer. De hecho, la palabra CRISIS significa
CRECIMIENTO.
Unicamente
pasando momentos difíciles e imposibles es como se llega a tener
FE
Es
decir certeza de lo que esperamos y convicción de aquello que no
vemos. Es necesario entonces que tengas que pasar por crisis
imposibles y difíciles, pero que son parte del proceso de tu madurez
cristiana.
Unicamente
pasando momentos difíciles e imposibles es como llegaras a tener
PACIENCIA. Llegaras a esperar no en tu tiempo y en tu metodo, sino en
el de Dios. Llegaras a esperar no en personas, circunstancias o
recursos, llegas a esperar en Dios.
Por
ejemplo...
Es
en esa enfermedad donde Dios te esta haciendo creer y a esperar en
EL, donde te esta haciendo reconocer tu fragilidad y dependencia de
su poder.
Es
en esa situacion
economica
difícil
donde estas aprendiendo a ver la provision inesperada y milagrosa de
Dios.
Es
en esa desilusión sentimental donde estas llegando a entender la
dimension del AMOR DIVINO, y que el amor humano es mezquino y lleno
de limitaciones.
Y
así pudiésemos seguir enumerando cada situación. Cuando la prueba
toca tu puerta y entra, es porque estas comenzando ese proceso de
madurez cristiana.
Gozate
por ello, porque aunque te sientas a la deriva, has de saber que Dios
tiene control.
Tribulaciones
/ Pruebas / Fe
Miles
de veces hemos escuchado estas palabras juntas y sabemos sus
significados pero realmente empezamos a sentirlas, vivirlas y saber
lo demasiado que pesan cuando llegan a nuestra vida. Cuando te
sientes cansado, desesperado y lo único que quieres es que ya
se acaben ¿qué haces? Como buen cristiano oras y le dices a
Dios que te ayude con todo lo que estás cargando, pero pasan
días, semanas y hasta meses y a veces pareciera que todo sigue
exactamente igual o hasta peor, entonces sientes impotencia al
no poder hacer algo para solucionarlo. Es cuando
pasamos por esos momentos que hasta llegamos a
reclamarle a Dios haciéndole preguntas como: ¿Por qué lo
permitiste? ¿Hasta cuándo quitarás esto de mi vida? ¿Te has
olvidado de mí? Sin embargo esta reacción en medio de la prueba no
es la de alguien que ha puesto su confianza en Dios, pareciera más
la de alguien que no ha conocido su poder y fidelidad y ahora está
dudando de Él.
Pero
entonces cuando estamos abrumados por las tribulaciones y las
pruebas: “¿Qué debemos hacer Dios?”
1)
“Búscame ¡Yo aquí estoy siempre!”
Job 8:5-6
“Si
tú de mañana buscares a Dios, Y rogares al Todopoderoso; Si
fueres limpio y recto, Ciertamente
luego se despertará por ti”
Lo
primero que debemos hacer es buscar a Dios SIEMPRE en lo bueno y en
lo malo, cuando responde y cuando pareciera que no lo hace, cuando lo
sentimos cerca y cuando pareciera que está lejos. Para hacer
esto es indispensable orar, leer su Palabra y meternos en su
Presencia, es decir, apartar un tiempo SÓLO
PARA ÉL.
En
1
Crónicas 28:9 El
rey David le dice a su hijo Salomón: “Reconoce
al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto y con ánimo
voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y
entiende todo intento de los pensamientos. Si tú le buscares, lo
hallarás; mas si lo dejares, él te desechará para siempre“.
Lo
que el Rey David, un hombre conforme al corazón de Dios estaba
diciendo aquí era que si en verdad buscas a Dios con todo tu
corazón ¡lo
vas a encontrar!
pero debes buscarlo de una manera desinteresada y no sólo para
que solucione tus problemas. Es como cuando identificamos a
alguien que nunca nos habla y con quien no tenemos una relación
de amistad y nos damos cuenta que sólo nos está buscando
cuando necesita algo de nosotros, nada más nos habla, y lo
primero que pensamos muchas veces es: “¡Seguramente, algo me
va a pedir!”, y a veces sentimos que no le importa pasar
tiempo con nosotros sino que su único interés es que
hagamos algo por él para después darse la vuelta y seguir
su camino. ¿No somos muchas veces así con Dios?, cuando tenemos una
necesidad lo buscamos y tan pronto nos contesta o nos soluciona
el problema ¡ya no lo buscamos de la misma manera! La
diferencia aquí es que Dios es tan bueno que su reacción
es súper diferente a como sería la nuestra, pues cada vez que
regresamos a Él nos recibe con los brazos abiertos dispuesto a
ayudarnos, consolarnos y darnos una nueva oportunidad.
2)
¡No te preocupes! y ten FE en Mí
2a Corintios 4:18
“No
mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues
las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son
eternas.”
Dios
sabe cuáles son tus problemas y qué es lo que
necesitas, ¡búscalo! Pero sobre todo nunca pierdas la FE,
como dice el versículo anterior la tribulación es temporal,
aunque ahorita no veas ninguna solución, ten fe en que Dios va
a hacer un milagro. Dios tiene un plan bien grande para todo lo
que estás pasando y tal vez te preguntarás: “¿Cuál
es el propósito de mi sufrimiento?”
La Biblia dice lo siguiente:
*En
Hechos 14:22:
“Confirmando
los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permaneciesen
en la fe,
y diciéndoles: Es
necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el
reino de Dios” Dios
te está preparando porque ¡quiere
que estemos juntos durante toda la eternidad!,
si Dios permite tribulación en tu vida es para tu bien, aunque
suene raro, él sabe qué necesitas para crecer
espiritualmente y quiere ayudarte a que te des cuenta de
que lo necesitas a Él. Porque a través de las pruebas sin
darnos cuenta nuestra relación con Dios se hace más
cercana que nunca antes ¡nos falta mucho por por crecer!
*Hechos
1:4:
“El
cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para
que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier
tribulación,
por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por
Dios“.
¡Dios quiere usar tu vida!, El quiere que tengas victoria en todas
las pruebas para usar tu testimonio para que otros puedan
afirmar su fe al escucharte. Él está trabajando contigo con
el fin de hacerte PERFECTO y usarte para consolar a otros en sus
pruebas.
¿Listo
para la batalla? ¡Dios ya te ha dado la victoria!
1a
Juan 5:4:
“Porque
todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria
que ha vencido al mundo, nuestra fe”
.
Si estás pasando por tribulaciones y pruebas lo mejor
que puedes hacer es recordar que Dios está contigo, acercarte a
Él y llenarte de FE en Él que es tu mejor defensa.
De
Dios para ti: Hijo/Hija:
Se que estas pasando por algo que es muy difícil para ti, pero yo
estoy contigo siempre aunque no te des cuenta desde que te levantas
hasta cuando duermes yo estoy contigo. El diablo te quiere destruir
pero yo se que tu vencerás porque yo te di todo para vencer. ¡No
renuncies! Ya falta poco para que mi plan perfecto se cumpla en ti
porque yo soy el autor de tu vida y todavía no sabes cómo termina
la historia que escribí para ti ¡Ánimo! (Salmos
139:2, Juan
13:7, Isaías
41:10, Isaías
54:17, Juan
10:10, Hebreos
10:35-39, Hebreos
12:2, Salmos
37:37).
Los
Cristianos fieles sufrirán. Aún así la vida cristiana es la mejor
porque únicamente la fe cristiana tiene la seguridad de que nosotros
podemos soportar, y de que Dios nos ayudará, que el resultado será
para nuestro bien, y que al final tendremos la vida eterna.
"Todo
lo puedo en Cristo que me fortalece" - Filip. 4:13. Dios te bendiga tu hermano: Hector Peguero.
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