Dios quiere habitar en ti…
Antes de todo debemos irnos al principio de la creación del hombre
para conocer que Dios le regalo? y que le encomendó a Adán y Eva? primeramente
en Génesis Dios le dio de su vida al hombre;
Génesis 2:7 “Formó, pues, Jehová Dios al hombre del polvo de la tierra,
y sopló en su nariz aliento de vida; y fue
el hombre un alma viviente.” Lo cual nos deja ver que solo tenemos vida
cuando tenemos la vida de Dios ósea el
espíritu santo dentro nosotros. Pero cuando Adán perdió la comunión con Dios
por desobedecerle, Génesis 2:17 “más del árbol de la ciencia del bien y del mal no
comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.” Desde
ese momento Adán y Eva murieron Espiritualmente.
Y desde ese entonces ha sido el plan de Dios de
habitar de nuevo en su mejor Templo, “nuestro corazón”, lo primero que hizo fue
que mando hacer un Tabernáculo a Moisés, para que su presencia estuviese entre
su pueblo, Éxodo 25:8-9 “Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de
ellos. Conforme a todo lo que yo te muestre, el diseño del tabernáculo, y el
diseño de todos sus utensilios, así lo haréis.” Pero el Tabernáculo solo podía estar en un pueblo a
la vez; Muchos años después le encomendó
a David que le construyera un Templo para El habitar y su pueblo lo pudiera
visitar, Pero por su desobediencia Dios escogió a su hijo Salomón para que
construyera ese Templo, 1 Crónicas 29:1 “Luego el rey David se
dirigió a toda la asamblea y dijo: «Mi hijo Salomón, a quien Dios evidentemente
ha elegido para ser el siguiente rey de Israel, es aún joven y sin experiencia.
El trabajo que él tiene por delante es enorme, porque el templo que construirá
no es para simples mortales, ¡es para el Señor Dios!” Y sabemos que Dios
le había dado a salomón el don de sabiduría, y en un momento de meditación preguntó y
se dijo a sí mismo: 2 Crónicas 6: 17-18 “Ahora, pues, oh Jehová Dios de Israel, cúmplase
tu palabra que dijiste a tu siervo David. Mas ¿es verdad que Dios habitará con
el hombre en la tierra? He aquí, los cielos y los cielos de los cielos no te
pueden contener; ¿cuánto menos esta casa que he edificado?” Después que paso un largo tiempo…. El Primer Templo
fue construido por el rey Salomón para sustituir al Tabernáculo como único
centro de culto para el pueblo judío. El Segundo Templo, mucho más modesto, fue
completado por Zorobabel en 515 ac. (durante el reinado del persa Darío I);
Reconstruido y ampliado por Herodes. Todos los fariseos y judaistas creían que
Dios habitaría allí para siempre, pero ellos no sabían que nosotros somos el verdadero templo del creador, y todo se
cumpliría con la llegada del mesías: Jesús el cual en su tiempo profetizó
en el libro de Juan 4:21-24 “Jesús le dijo: Mujer, créeme, que está llegando la hora
en que ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre. Vosotros adoráis lo
que no sabéis; nosotros adoramos lo que sabemos; porque la salvación viene de
los judíos. Pero llega la hora, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores
adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre busca tales
adoradores que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, es necesario
que le adoren en espíritu y en verdad.” Lo dice
Jesús que no se trata de un lugar
específico para adorar a Dios sino que se trata del corazón del hombre en el cual Él siempre ha querido habitar, Además no
solo salvación para los Judíos sino para todo el que lo busque de corazón, Y no
confinado a cuatro paredes, y esto lo podemos ver en el libro de los Hechos
7:47-49 “Mas Salomón le edificó casa; si bien el Altísimo no habita en templos
hechos de mano, como dice el profeta: El cielo es mi trono, Y la tierra el
estrado de mis pies. ¿Qué casa me edificaréis? dice el Señor; ¿O cuál es el
lugar de mi reposo?”
También podemos comprobar este pasaje en el mismo libro de los
hechos, donde Dios nunca quería habitar en templos hecho por manos humanas,
sino en cada uno de sus hijos y lo vemos
de nuevo en Hechos 17:24 ‘El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él
hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por
manos humanas,”
Nosotros somos los que encerramos a Dios entre
paredes, en reglas, en doctrinas que ni se asemejan a Su presencia y su Palabra.
Pretendemos, siendo imperfectos, crear la perfección. Pero, ¿Quiénes somos
nosotros para construir templos e iglesias para Dios Omnipotente y
Omnipresente? 1 Reyes 8:27 "Pero ¿es verdad que Dios morará sobre la tierra? He
aquí que los cielos, los cielos de los cielos, no te pueden contener; ¿cuánto
menos esta casa que yo he edificado?" Nuestro Dios nunca ha
querido habitar en edificios llenos de lujos e idolatría, hechos por el hombre
solo para hacer rituales vanos que no te ayudan a conocer a tu Dios, Jeremías 23:23-24 ¿Soy yo Dios de cerca
solamente, dice Jehová, y no Dios desde muy lejos? ¿Se ocultará alguno, dice
Jehová, en escondrijos que yo no lo vea? ¿No lleno yo, dice Jehová, el cielo y
la tierra? Y en conclusión….Dios es tan grande que la tierra es su
banquillo para descansar los pies y tan pequeño que puede habitar en nuestros corazones…
Isaías
66:1-2 “1 Jehová dijo así: El cielo es mi trono, y la tierra estrado de mis
pies; ¿dónde está la casa que me habréis de edificar, y dónde el lugar de mi
reposo? Mi mano hizo todas estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice
Jehová; pero miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a
mi palabra.” Todo esto nos lleva
a concluir que el propósito de Dios desde el principio es y ha sido la reconciliación de la relación que el hombre
había perdido en el Edén y habitar en nuestro corazón para darnos de su vida,…2
Corintios 5:19 “que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no
tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la
palabra de la reconciliación. Que la paz de Dios inunde tu alma: HECTOR PEGUERO.-
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