jueves, 7 de marzo de 2013



“Dios no mira como Tú y Yo miramos”

1 Samuel 16:7 “Y Jehová respondió a Samuel: No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón."
Muchas personas incluyendo cristianos juzgan a las demás personas por su apariencia, sin prestar atención a su entrega, dedicación, integridad y pasión; Dios escudriña nuestros corazones para discernir nuestra real motivación y para saber si estamos dispuestos a obedecerlo y agradarlo a Él y no a los hombres.   Por ejemplo cuando Samuel le pregunto al padre de David (Isai) acerca de su hijo David este le llamo “el menor” porque ante sus ojos, David era el más insignificante y por esto lo tenía con la ovejas,1 Samuel 16:11 "Entonces dijo Samuel a Isaí: ¿Son éstos todos tus hijos? Y él respondió: Queda aún el menor, que apacienta las ovejas. Y dijo Samuel a Isaí: Envía por él, porque no nos sentaremos a la mesa hasta que él venga aquí."  Pero lo que Dios veía no era un niño sino a un hombre; 1 Samuel 13:14 "Mas ahora tu reino no será duradero. Jehová se ha buscado un varón conforme a su corazón, al cual Jehová ha designado para que sea príncipe sobre su pueblo, por cuanto tú no has guardado lo que Jehová te mandó.” Dios veía un Hombre con un corazón dispuesto y un adorador en espíritu y en verdad.
A Dios no lo podemos engañar por eso el busca hombres y mujeres que tengan un corazón de carne dispuesto a recibir su santo Espíritu y obedecer, Ezequiel 11:19 "Y les daré un corazón, y un espíritu nuevo pondré dentro de ellos; y quitaré el corazón de piedra de en medio de su carne, y les daré un corazón de carne,"
Hermanos el “Corazón” cuando hablamos bíblicamente es donde guardas tus sentimientos y emociones, “No” es el corazón que late y distribuye la sangre por todo el cuerpo, Además debemos saber que nuestros pensamientos salen del corazón y lo que sale de nuestros labios también proviene del corazón.
Este concepto lo podemos ver desde el principio de la creación, cuando Dios examino el corazón de los hombres  y solo hayo maldad, Génesis 6:5 "Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal." En el nuevo Testamento nuestro Señor Jesucristo escudriño los Pensamientos de los corazones de los escribas, Mateo 9:4 "Y conociendo Jesús los pensamientos de ellos, dijo: ¿Por qué pensáis mal en vuestros corazones?"  Podemos preguntarnos porque es tan importante este análisis personal hacia nuestros pensamientos que salen del corazón? Porque Dios nos Revela en las Escrituras, que lo que sale de nuestro corazón revela  quiénes somos y que llevamos dentro,  Mateo 15:18-19 "Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre. Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias.”
Debemos estar llenándonos  de la Palabra de Dios, día a día: nuestra mente y nuestro corazón; Porque de lo que esté lleno el corazón, de eso hablaremos y será nuestra prioridad, como lo vemos en Mateo 12:34 "¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca."              Pero debemos tener en cuenta muy en cuenta! Que lo mas engañoso que tiene el hombre es el corazón, y por eso a veces tomamos malas decisiones en nuestro diario vivir; por ejemplo: con quien nos juntamos o que negocio hacemos; Jeremías 17:9 "Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?" Solo Dios lo conoce!  Tenemos que proponernos en nuestros corazones hacer el bien, tener pensamientos de bien y no de mal y todo esto lo conseguimos con la ayuda de Dios por medio de la justificación y redención de nuestros pecados que se nos dio atravez del sacrificio en la Cruz de nuestro Señor Jesús, Daniel 1:8 "Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse." 

Y  nuestra Promesa como pueblo escogido por Dios, la encontramos en Jeremías 24:7 " les daré corazón para que me conozcan que yo soy Jehová; y me serán por pueblo, y yo les seré a ellos por Dios; porque se volverán a mí de todo su corazón."         Si le pedimos a Dios que examine nuestro corazón y que nos dé un corazón dispuesto a aceptar lo que su Santo Espíritu quiere quitar o poner, entonces podremos caminar en la voluntad de Dios y recibir las bendiciones de Dios.              
Dios no mira ni juzga como tú y yo lo hacemos, siempre basados en lo que tenemos en frente, Juan 7:24 "No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio. ¿Es éste el Cristo?" Pero recordemos que para nosotros poder ver como Cristo ve, debemos poner los ojos en el cielo ósea en Dios y en las bendiciones Espirituales, porque es la única forma de ver y apreciar cuando Dios nos habla, nos guía y nos llena de su conocimiento, Mateo 16:23 "Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres."
Espero en Dios que nuestros OJOS sean abiertos para ver la gloria de Dios manifestada en nuestras vidas, Tu hermano de siempre HECTOR PEGUERO.

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