¿ Porque descansó Dios después
de la creación
del mundo y que
significado tiene?
Génesis 2:1-3 “Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.”
Dios no reposó porque
estuviera cansado, sino porque la obra que se propuso hacer ya estaba completa.
Ya no había nada más que agregar. Todo estaba perfecto tal como lo había hecho.
La obra “Completa”
de Dios va más allá de lo que nos imaginamos. Dios no sólo acabó de crear lo
pasado, sino que también el futuro. Tal
vez a nosotros nos cueste entender, porque estamos limitados por el tiempo,
pero Dios no lo está. Él es eterno; Para Dios, el futuro ya está hecho. Desde
el principio, Dios no sólo creó lo que era en ese momento, sino también lo que
será. Por eso, cuando acabó Su obra, Él reposó. No había nada más que hacer.
Todo estaba hecho. Desde el principio, Dios diseñó el final de los tiempos, y
todo lo que sucede en medio. Dios no se
ha desentendido del mundo. Él está en control de todo. Qué tranquilidad debería
traernos el saber que Dios hizo su obra perfecta, y Qué mejor reposo podemos
tener al saber que Dios está en control?
Salmos 138:8 “Jehová cumplirá su propósito en mí; Tú misericordia, oh
Jehová, es para siempre; No desampares la obra de tus manos.”
Filipenses 1:6 “estando persuadido de esto,
que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de
Jesucristo;” Dios
no descansó hasta que Él había terminado la obra que había hecho. De la misma
manera, Jesús hizo la obra de Su Padre con fidelidad e instó a otros a hacer lo
mismo, mientras todavía había tiempo Juan 9:4 “Me es necesario hacer las obras
del que me envió, entre tanto que el día dura; la noche viene, cuando nadie
puede trabajar”. Y así cuando Él estaba siendo crucificado por nuestros
pecados, sólo cuando estaba absolutamente seguro que Su obra de redención
terminó, pagando el precio por nuestros pecados, dijo estas palabras en la Cruz,
Juan 19:30 “Cuando Jesús hubo tomado el
vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el
espíritu.” Entonces, una vez más, el Hijo de Dios descansó en el día Sabbath,
en la tumba , hasta el amanecer del primer día de la nueva semana, y una nueva
dispensación una nueva redención o expiación nació (La Gracia). El verbo: Sabbat
“descansar” significa interrupción del
trabajo. Es imposible que Dios estuviera cansado; Isaías 40:28 “¿No
has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines
de la tierra? No desfallece, ni se
fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance.” Jehová Jamás duerme ni se adormece
Salmo 121:4 “He
aquí, no se adormecerá ni dormirá El que guarda a Israel.”
Algo muy importante es
que No hay nada en estos pasajes, que
mande la observancia de este día. El Pacto con Adán no ordena en absoluto
guardar el séptimo día como día de descanso. Sin embargo, el séptimo
día había establecido un patrón permanente para el ritmo de la vida humana. Jehová
nos creó a Su imagen, y Él nos ha programado de tal manera que funcionamos
mejor cuando seguimos el modelo de trabajo y descanso que es un paralelo a la
semana de la creación. La proporción ideal es trabajar seis días y descansar el
séptimo. Las personas y los animales muestran rápidamente signos de fatiga
cuando pierden un día de descanso por semana.
Así como Dios reposó de
toda la obra, así también los creyentes pueden compartir el descanso que Jesús
ofrece: Hebreos 4:4 “Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó
Dios de todas sus obras en el séptimo día”. La palabra hebrea se
basa en el verbo descansar que es la forma verbal del sustantivo hebreo “Sabbat”,
o el sustantivo sábado.
El Sabbat, muchas veces escrito
también como shabat (hebreo: שבת, shabbath, "cesar") o su variante en yidis,
shabbos (שאבּעס), es el séptimo día de la semana, siendo a su vez el
día sagrado de la semana judía. El nombre propio Sabbat no se utilizará hasta
el Éxodo, porque sólo entonces es dado en realidad el mandamiento de santificar
el día Sabbat, En Éxodo 20:8-11 “Acuérdate del día
de reposo para santificarlo. Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; más el séptimo día es reposo[b] para Jehová
tu Dios; no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo,
ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas.
Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las
cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo
el día de reposo y lo santificó.”
Dios les dio a los israelitas el cuarto de Sus Diez Mandamientos. Era
"acordarse" del día de reposo y "santificarlo." Un día de
cada siete, los israelitas debían descansar de sus trabajos, y darles el mismo
día de descanso a sus sirvientes y animales. Cada semana, cualquier trabajo que
estuvieran haciendo debía detenerse por un día. Los rabinos enseñan que el Sabbat
es un paralelo del mundo por venir, un momento de completa bondad y paz para
aquellos que son dignos de él. El verbo bendecir (hebreo) Barak significa ser
apartado; Refiriéndose a apartarnos de las obras o rituales y descansar en
Dios. La Biblia nos muestra claramente
que Dios preparó la Tierra durante un periodo de 7 "días” creativos. Al
parecer cada día duró miles de años, y no 24 horas como malamente dicen muchos
religiosos; Porque? porque dice 2 Pedro 3:8 “Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el
Señor un día es como mil años, y mil años como un día”. Este descanso
de Dios, es un descanso de crear formas de vida materiales en el Planeta Tierra
o el universo. Pero Jehová ha seguido trabajando en hacer otras obras, y la
palabra de Dios no se contradice sino que se explica ella misma. Juan.
5:17 “Mi Padre ha seguido trabajando hasta ahora, y yo sigo trabajando”.
Es curioso que tanta
gente se resista a la idea del “Reposo”.
Lo perciben como una “limitación”, en lugar del alivio que está diseñado
a traernos. Tal vez la razón profunda
del rechazo al “Sabbat” se debe a que la gente no quiere ceder el control;
quieren seguir haciendo sus obras y
depender de ellas, en lugar de soltar, confiar en Él, y reposar en Dios. El
Sabbat no es una limitación, sino un reposo.
Por eso Jesús dijo: Marcos 2:27 “El día de reposo se hizo para
el hombre, y no el hombre para el día de reposo”. Pablo habló del día
descanso de Dios y explicó: Hebreos 4:10-11 “Porque el que ha entrado en
su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas.
Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante
ejemplo de desobediencia.” En éste capítulo explica que el descanso de Dios aún se
mantiene, y también lo compara con una condición espiritual aprobada a la cual
los hijos de Dios pueden entrar con libertad. Es como ingresar en el lugar de Retiro
(seguridad social o vacaciones) de Dios, y así recibir su protección.
"¿Cómo es Jesús
nuestro reposo?"
La clave para entender cómo Jesús es nuestro
reposo yace en la palabra hebrea Sabbat, que significa "descansar, o parar, o dejar de
trabajar." El origen del día de reposo se remonta al viejo
Testamento en donde la Ley de los Judíos
del Antiguo Testamento, "trabajaban"
constantemente para hacerse aceptables a Dios. Y trataron de obedecer la ley
ceremonial, la ley del templo, las leyes civiles, etc. Pero ellos no podían
cumplir todas las leyes, así que Dios proporcionó una serie de ofrendas y
sacrificios por el pecado para que pudieran acercarse a Él para obtener perdón
y restaurar la comunión con Él, pero sólo temporalmente. Hebreos 10:1 " Porque
la ley, teniendo la sombra de los bienes venideros, no la imagen misma de las
cosas, nunca puede, por los mismos sacrificios que se ofrecen continuamente
cada año, hacer perfectos a los que se acercan." Sin embargo, estos sacrificios señalaban hacia el
futuro. Fueron ofrecidos en anticipación del sacrificio supremo del Cristo en la cruz, Hebreos 10:12 " pero
Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los
pecados, se ha sentado a la diestra de Dios," Después de realizar el sacrificio supremo, Jesús se
sentó y "descansó" —esto es, cesó Su labor de expiación; La labor de redención estaba terminada (Juan
19:30). Por el sacrificio de Jesús,
nosotros ya no tenemos que "trabajar," manteniendo la ley para ser
justificados ante los ojos de Dios. Jesús vino para que nosotros pudiéramos
descansar en Dios y en la salvación que Él ha proporcionado, para nosotros los Gentiles.
En Cristo encontramos total descanso de las labores de nuestro
esfuerzo propio, porque sólo Él es santo y justo Y lo más importante es que Jesús
es "Señor del día de
reposo" Mateo 12:8 “porque el Hijo del Hombre es
Señor del día de reposo”. Como Dios encarnado, Él decide el verdadero
significado del día de reposo porque Él lo creó, y Él es nuestro día de reposo
encarnado.
Cuando los fariseos criticaron a Jesús por
sanar en el día de reposo, Él les recordó Lucas 14:5 “Y dirigiéndose a ellos, dijo:
¿Quién de vosotros, si su asno o su buey cae en algún pozo, no lo sacará
inmediatamente, aunque sea en día de reposo? “ Ellos aplicaban la ley
solo cuando no les ocasionaba pérdidas o tropiezos, pero La salvación que Jesús
proporciona es más importante que las reglas y todos los rituales. Jesús
restableció el día de reposo para hacer
descansar al hombre de sus obras, no solo del trabajo manual sino del tratar de
ganarnos la justificación del pecado a través de nuestro esfuerzo y nuestras
obras, de intentar alcanzar nuestra propia salvación por medio de nuestros sacrificios (ayuno, oración,
etc.) Pero gracias a Dios, Jesús vino
para librarnos de la Ley por Su gracia Romanos
6:14 “Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la
ley, sino bajo la gracia. “ Ya
no tenemos que tratar de ganarnos el cielo por nuestras acciones sino que es un
regalo inmerecido (Gracia) Y ahora lo que a Dios le agrada es que descansemos
en El. Y nuestro Redentor es Señor del
día de reposo, y Él nos da descanso. Hemos
sido creados con la necesidad de estar en Su Presencia, allí el cansancio no existe.
Podemos vivir en Su Presencia sin cansarnos, adorarle sin cansancio... Hoy las palabras de Jesús resuenan: Mateo
11:28-30 “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré
descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y
humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.” Pero
recuerda que lo contrario a obedecer a Dios y entrar en su Reposo, es endurecer nuestro corazón y no escuchar
la palabra de Dios; Como los israelitas
hicieron en el desierto, Y a causa de su incredulidad, Dios le negó la entrada a la Tierra Prometida, diciendo: "No entrarán en Mi reposo" Hebreos
3:11. El autor de hebreos nos ruega que no cometamos el mismo error, rechazando
el reposo de Dios en Jesucristo. "Por tanto, queda un reposo para el
pueblo de. Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en
semejante desobediencia Hebreos
4:9-11 “Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. Porque el que ha
entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas.
Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante
ejemplo de desobediencia.” La desobediencia que ellos cometieron fue su
“Incredulidad”, por no creerle a Dios No entraron en el descanso de Dios. Y Jesús
a nos da la promesa más bella que recibimos al entrar a su reposo o su
presencia…….. SAN MATEO 11:28-30 “Venid a mí todos los que estáis trabajados y
cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de
mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras
almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.” Jesús hablaba a personas
cansadas espiritualmente, y sus palabras eran "Vengan a mí y los haré
descansar... Vengan a mí y hallarán descanso para sus almas". Dios me los bendiga hermanos en
Cristo: ...........HECTOR PEGUERO.
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