Albert   Einstein  Creía  en  Dios!

No hace mucho, tuve la oportunidad de escuchar en una cita Cristiana, las siguientes palabras de Einstein durante un debate religioso contra los ateos: "En vista de tal armonía en el cosmos que yo, con mi mente humana limitada, soy capaz de reconocer, hay aún gente que dicen que no hay Dios. Pero lo que me enfurece es que me citan para apoyar este tipo de opiniones." † Parece ser, entonces, a primera vista, que Einstein era probablemente de una actitud Religiosa. Esta opinión se apoya en las siguientes citas repetidas a menudo por Einstein:

"La ciencia sin religión es coja, la religión sin la ciencia es ciega." †

"Ante Dios todos somos igualmente inteligentes, e igualmente tontos." †

"YO, en cualquier caso, estoy convencido [Dios] no juega a los dados." †

"El Señor Dios es perspicaz, pero no es malicioso." †

"Quiero saber cómo Dios creó este mundo. No estoy interesado en este o ese fenómeno, en el espectro de este o aquel elemento. Quiero saber sus pensamientos. El resto son detalles." † A pesar de haber nacido en una familia judía, incluso se puede especular que Einstein identificado con el Cristianismo, dado su respuesta cuando el entrevistador le preguntó acerca de Jesús: Entrevistador: "Usted acepta la existencia histórica de Jesús?" Einstein: "Sin duda! Nadie puede leer los Evangelios sin sentir la presencia real de Jesús. Su personalidad late en cada palabra. Ningún mito está lleno de dicha vida. Por ejemplo: “Es la impresión que recibimos de una historia de héroes legendarios de la antigüedad como Teseo y otros héroes de su tipo, y se palpa la falta y la auténtica vitalidad de solo el nombre de Jesús irradia." † Al parecer concluyente con citas como estas, ¿cómo podríamos nunca dudar de la actitud religiosa de Einstein? Así que echemos un vistazo a las siguientes frases que a veces hacen referencia los ateos para demostrar que Einstein era uno de ellos:

"asumir la existencia de un ser casi imperceptible… no facilita la comprensión del orden que encontramos en el mundo perceptible." †

"La palabra Dios es para mí nada más que la expresión y producto de las debilidades humanas, la Biblia una colección de honorables, pero siguen siendo primitivas leyendas que son sin embargo bastante infantil. †

"No puedo concebir un Dios que premia y castiga a sus criaturas, o que tiene una voluntad parecida a lo que nosotros humanos, experimentamos. Ni puedo ni quiero pensar en la persona que sobrevive a su muerte física." †

**Cuando Einstein atendía a la universidad tuvo una discusión con un profesor, sobre la realidad de Dios y su existencia:

El profesor universitario retó a sus alumnos y les pregunto: Dios creó todo lo que existe? "Un estudiante valientemente respondió sí, es cierto!" "Dios creó todo?" Preguntó el profesor. "Sí, señor", respondió un estudiante.

El profesor respondió: "Si Dios creó todo, entonces Dios creó el mal, y como el mal existe, y de acuerdo con el principio de que nuestras obras definen quiénes somos, entonces Dios es malo. “ El estudiante quedó en silencio ante la respuesta. El profesor estaba bastante satisfecho con él mismo, se jactó ante los estudiantes de que había demostrado una vez más que la fe cristiana era solo un mito.

Otro estudiante levantó su mano y dijo: " ¿puedo hacerle una pregunta profesor?" "Por supuesto", respondió el profesor. El estudiante se levantó y le preguntó: " ¿El frío existe Profesor?" “¿Qué tipo de pregunta es esta? Por supuesto que existe. Ustedes nunca han sentido frío?" Los estudiantes rieron disimuladamente comentando en la pregunta del joven.

El joven replicó: "En realidad profesor, el frío no existe. De acuerdo con las leyes de la física, lo que consideramos frío es en realidad la ausencia de calor. Todos y cada uno de los objetos son susceptibles de estudios cuando tienen o transmiten energía;

Y el calor es lo que hace que un cuerpo o materia transmitir energía. Cero Absoluto (- 460 grados F) es la ausencia total de calor; Toda la materia se vuelve inerte, incapaz de reacción a esa temperatura. El Frío no existe. Hemos creado esta palabra para describir cómo nos sentimos si tenemos muy poco calor. El estudiante continuó. "Profesor, ¿La oscuridad existe?" El profesor respondió: "claro que sí!!!". El estudiante respondió: "Una vez más se equivoca profesor, la oscuridad no existe. La oscuridad es en realidad la ausencia de la luz. La luz podemos estudiar y hasta medir, pero no la oscuridad; De hecho, podemos utilizar:” El prisma de Newton” el cual es un prisma triangular de cristal que al ser atravesado por la luz blanca la descompone en los colores del arco iris, y estudiar las distintas longitudes de onda de cada color. No se pueden medir las tinieblas pero la luz si! Un simple rayo de luz puede entrar en un mundo de oscuridad y la iluminará. ¿Cómo puedes saber que tan oscuro es o esta un espacio oscuro? Tú debes medir la cantidad de luz presente. No es esto correcto? - La Oscuridad es un término utilizado por el hombre para describir lo que sucede cuando no hay luz presente." Finalmente, el joven preguntó al profesor. "Señor lo diabólico existe?"

Ahora confuso, el profesor respondió: "Por supuesto, como ya he dicho. Lo vemos cada día. En el ejemplo diario de la inhumanidad del hombre para el hombre. Es en la multitud de la criminalidad y la violencia en todo el mundo. "Estas manifestaciones no son sino la existencia del mal."

A esto el estudiante respondió: "El mal no existe, o al menos no existe en sí. El mal es simplemente la ausencia de Dios. Es como la oscuridad y el frío, una palabra que el hombre ha creado para describir la ausencia de Dios. Dios no ha creado el mal. El mal no es como la fe o el amor, que existen al igual que luz y calor. El mal es el resultado de lo que sucede cuando el hombre no tiene presente el amor de Dios en su corazón. Es como el frío que viene cuando no hay calor o la oscuridad que llega cuando no hay luz."

El profesor se sentó. Y el joven le dijo su nombre --- Albert Einstein.

Albert Einstein (1879-1955), físico alemán, posterior­mente suizo y finalmente norteamericano, profesor de Física Teórica en Zurich y en Praga, y Premio Nobel de Física en 1921 por sus estudios sobre el Efecto Fotoeléctrico, no necesita presentación. Sus primeros trabajos trascendentales se centraron en la Teoría de la Relatividad especial, en el movimiento browniano y en el efecto fotoeléctrico. Revolu­cionó la Filosofía, la Mecánica, la Física y la Astronomía. Su teoría del campo unitario sintetiza los campos electromagné­tico y gravitatorio. Es aceptado como el físico más genial del siglo XX y de la historia. Sus teorías científicas se enseñan en todas las universidades del mundo, subrayándose la capacidad y magnitud de su cerebro; sin embargo, se silencia maliciosamente su grandeza de alma, su testimonio espiritual, sus postulados de fe, raíz y cumbre de su increíble ciencia. Para Einstein, además, Dios es «el más fuerte y noble motor de la investigación científica». ¿No induce este criterio a estimar que los ateos, desprovistos de ese "Motor" por voluntad propia, marginan y limitan su propia capacidad para desarrollar algo decisivo y esperanzador para la historia de los hombres, en su vida profesional?

Unos de las frases más contundentes de Einstein: «La religiosidad consiste en tener conciencia de que existe lo impenetrable para nosotros, de que hay manifestaciones de la más profunda razón y la más deslumbrante belleza que sólo en sus formas más primitivas son accesibles a nuestra razón». Para Einstein, creador de muchos inventos y Leyes Físicas, una gloria humana del saber y de la ciencia; Deseando que quedara constancia de su pensamiento espiritual, dejó por escrito, con nitidez, un breve testamento: “El sentimiento religioso guarda estrecha relación con el tenor de vida del investigador serio de la naturaleza, porque este sentimiento no puede significar, en cualquier caso, que las relaciones extraordinarias que el científico contempla son ideadas por él. En un universo incomprensible se revela una Razón Infinita superpuesta.” Pienso que los verdaderos científicos, como los filósofos sin prejuicios, siempre se preguntan sobre los últimos porqués, y las primeras causas. Einstein así lo hizo, por eso se le puede considerar un hombre que supo armonizar la fe y la razón. Dios te Bendiga.